FALTAN CINCO PA´LAS DOCE, EL AÑO VA A TERMINAR…
.
Todo era enorme, quedaba embelesada ante el pesebre que mis tías hacían en uno de los tantos cuartos que la casa tenía. Casi todos los muñecos eran elaborados a mano, campesinos en miniaturas con sombrero y ruana, muñecas con blusas blancas, faldas negras y trenzas, las caras hechas con pepas de mamoncillo, gallinas con plumas verdaderas, las casas con techos y flores diminutas; por donde miraba, encontraba algo que iluminaba mi alma, para mí era el comienzo de una época bella.
Los primeros días de Diciembre se hacía el paseo para recoger musgo y quiches , en fila india mi tío nos transportaba a un mundo de ensueño, de magia; nos metía entre cuevas, subíamos y bajábamos la montaña recogiendo flores, lama y todo lo que sirviera para adornar, nos metía en el río para recoger piedras y luego pintarlas, claro después de gritar cuando nos topábamos con un cangarejo como decían los campesinos.
Nada se hacía antes del diez y seis, era la tradición. En la cocina había mucho movimiento, buñuelos, natilla blanca con dulce de mora, brevas con arequipe, arroz de leche y en algunas oportunidades se traía de otra ciudad el desamargado, lo mismo que las piedras con un baño de pólvora que al lanzarlas explotaban para delicia de los niños; ahhh y el tarro de avena Quaker repleto de totes, se hacía rodar y el sonido era música para nosotros, así como los villancicos.
Ese mismo día comenzaban los aguinaldos, juegos a veces llenos de picardía como el si y el no, el beso robado, pajita en boca, tres pies, con su permiso me siento, todo era fiesta a partir de esa fecha ...y qué decir de la novenas, era lo mejor, sobre todo cuando decían padre putativo de Jesús, ningún niño sabía el significado pero había que reírse en silencio, con miradas de complicidad entre los primos, tapándonos la boca y cuchicheando; cada noche la presidía una familia diferente (se denominaban alférez) quienes eran los encargados del rezo y el refrigerio.
Así durante nueve días de fiesta familiar, esperábamos el día soñado: 24 de Diciembre, ropa nueva,comida, aguinaldos y la expectativa: ¿qué nos traerá el niño Dios? llegada la noche la reunión era en la casa de mis tíos, novena, charla, risas, pólvora y los niños a dormir; al día siguiente madrugábamos y sobre la cama estaban los regalos, algarabía total, mientras tanto los adultos dormían el trasnocho del día anterior.
Seguía la semana y ahora era más social el evento, los jóvenes y los adultos se colocaban trajes de gala para recibir el año nuevo, todo un acontecimiento, esa noche había baile, comida, licor, los pequeños podíamos participar hasta la madrugada, Faltan cinco pa´las 12 el año va a terminar…era la canción que daba la pauta para que en punto de la medianoche comenzaran los abrazos, los llantos, las promesas, siempre me pregunté por qué las lágrimas? me parecía estúpido, si la celebración estaba buenísima ¡qué majaderos! pero con el paso de los años me dí cuenta por qué.
Para mí esa época era maravillosa pero a medida que transcurría el tiempo, la tradición fue dando un vuelco, ya no siento lo mismo, a veces me culpo de no haber inculcado a mis hijos esa tradición pero ¿cuál? ¿Cuál es el verdadero significado? No sé...todavía me pregunto por qué no es igual ¿Falta la familia? ¿Será que al crecer la magia se pierde? De pequeña me sentía en un mundo maravilloso, de aventura, risas, expectativas y mil colores, tal vez de niños jugamos con duendes, hadas, mariposas, de adultos con miedos, rencores, angustias. He intentado revivir esa magia pero mis hijos no lo disfrutan y cada fin de año quiero acabar rápido y acostarme a dormir…siempre con la nostalgia de un pasado maravilloso ¿Qué pasó? Aún no tengo la respuesta.
Gracias por tantos recuerdos, también añoro esas épocas, sobre todo por mis hijos que me hubiera encantado que las vivieran como las viví yo y que cuando ya estén mas grandecitos no me van a creer tantas lindas experiencias, durante tantas generaciones que nos reíamos con la oración a san José y las abuelas callandonos cuando oiamos la palabra Putativo, gracias mariposa por prestarnos tus alas y llevarnos volando a un lindo pasado que tal vez no volverá....
ResponderBorrarVeo que también estás nostálgico amigo y sí fue una época maravillosa ahora la inquietud es? vamos a seguir o nos quedamos de brazos cruzados?
ResponderBorrarY si sigues así, llegará el día en que prefieras irte a dormir antes que esperar la medianoche sin celebrar.
ResponderBorrarExcelente entrada. Gracias Mareña.
ResponderBorrarEste blog ha sido eliminado por un administrador de blog.
ResponderBorrarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderBorrarUna montaña de recuerdos me trajo mi mariposa preferida. Nos hacían acostar para que Papá Noel entrará y nos dejará los regalos y nosotras cuchicheabamos, mientras manteniamos un ojo abierto para verlo entrar con los regalos. Nada electrónico... estufitas azules y juegos de ollas compañeras (mmm creo que nos estaban entrenando). Camioncitos rústicos de madera con cuerda larga para arrastrarlos y muñecas con cabellera plástica incorporada.
ResponderBorrarChamizos con bolitas de icopor pegadas en las ramas, para que imagináramos la nieve.
Y cuando la navidad era en el pueblo que sabemos, una enorme lechona que parecía sonreir con sus dientes tostados.
Pero no todo tiempo pasado fue mejor; lo mejor es el momento.
Te quiero mucho primita.
Tita
Hola Mareña..el embrujo de las evocaciones hacen palpitar el alma..eran Navidades diferentes , sin tanta tecnologia pero con muchisimo calor humano y union familiar. Si hay algo que recuerdo es el paseo a la carrilera para colocar las tapas de gaseosa sobre los rieles y asi , despues de psar el tren y dejarlas totalmente planas, les haciamos un agujeroi en el centro para ensartarlas en un alambre y tener asi los "cascabeles" para acompañzar lo villancicos. Y aunque los recuerdos son hermosos y nos transportan a realidades diferentes, me uno a lo que dice tu prima Tita..lo mejor es disfrutar el momento presente, asi que FELIZ NAVIDAD !!!
ResponderBorrarSe me olvido colocar el nombre en el comentario. Para toda tu familia y "alrededores" una Navidad llena de Amor y cosas lindas
ResponderBorrarRodrigo Monsalve Echeverri
Medellin-Colombia
Sí Marqués lo mejor es "vivir la vida loca" cierto? jajajaja y celebrar como dice mi prima vivir el momento, eso hay que hacerlo César muchas gracias y Rodripara ti tambiény tu familia muchas felicidades en estas fiestas
ResponderBorrarLa MoNa: Si recuerdo que tiempo atrás en cada viaje a Bogotá al despertarnos también teniamos los regalos en la cama. Pero la verdad ma... no recuerdo que nos hayas hecho revivir esa magia de la que tanto hablas cuando chiqui.
ResponderBorrarUn beso y siempre hay tiempo para hacerlo!!!